Bueno amigos, parece que la analítica que me hicieron y el tema hormona que era el importante han salido bien. O sea mal. Naturalmente me vine abajo sin disimulo, muy afectado. Me acompañaba "G" que no quiso dejarme solo y no os podéis hacer una idea de cuando le dije a la doctora sin mayor preambulo ni preparacion que quería morirme. Me salió del alma.
El silencio ensordecedor duró apenas unos segundos, el tiempo que tardó en reaccionar mirándome a los ojos para decirme que tenía que ir al psiquiatra. Traté de explicarle sosteniéndole la mirada, que mi problema es primero el sueño, luego la depresión, y luego me interrumpió y dijo que mi mayor problema es la adrenoleucodistrofia y que por eso estaba yo allí.
Que en lo que a ella respecta estoy en el límite, pero vamos que no hay riesgos. Me vine abajo, otra vez. Porque claro tú vas con toda la ilusión del mundo a que te digan que te quedan dos meses o un año y ahora resulta que no.
Ya no hay esperanza, porque en el tema neurológico se que voy a ir cada vez a peor, con mas limitaciones, caidas y golpetazos por todo el cuerpo hasta no poder moverme de cintura para abajo.
Esto no se hace ¡hombre por Dios! con la ilusión que llevaba uno. Por cierto me cai escaleras mecanicas abajo en Atocha, menudo hostión, me levantó un latino de esos guapos de culebrón y antes de eso casi me tira el enloquecido conductor de la EMT; tenia que haber tomado la matricula y la hora para denunciarle porque no llegó ni a parar y ya estaba en marcha otra vez. Que hijoputa viendo a un minusvalido tratando de bajar de su autobus cargado de un andador. Esta vez me sujeto una señora, también latina. Creo que volveré al bastón porque ninguno de los aparatosos aparatos me ha dado otro resultado que mermar mis bolsillos y nada positivo, el problema es que con el bastón no tengo ni de lejos garantizada la estabilidad y sí las caidas. No se como hacer para moverme, el otro dia en la cama me tuvo que mover mi padre los pies porque yo solo no podía. ¿que calidad de vida es esa? ¿que me espera? Tengo 47 años, me dan escalofrios solo de pensarlo. ¿Probar con dos bastones a lo montañero por las calles de mi ciudad?
La parte buena llego en otro autobús el que me llevó desde Madrid a Móstoles, conducía una chica pelo ensortijado, pelirroja, sonriente, no pude averiguar, tan solo suponer el color de sus ojos porque llevaba gafas de sol pero tenía una preciosa sonrisa y alegría contagiosa. Además de unas manos diminutas pero muy bonitas. Sin alianzas.
Me dijo:
- Quedese aqui delante para bajar mejor
- Es que me bajo en la ultima, voy al hospital.
Cuando llegamos se ofreció a bajarme el andador o si preferia la rampa, cosa que nadie ha hecho jamas, no se para que coño publicitan autobuses con rampa cuando ni siquiera son capaces de bajar un poco la altura del bus ni a las personas mayores para facilitarles la subida o bajada. Conste que no necesito rampas. Desde aqui mi denuncia a toda esa brutalidad de conductores de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid que nos transporta como a ganado.
Como es natural le dije:
- Eres la mejor conductora de autobuses con la que me he cruzado, muchas gracias.
- Uff muchas gracias a tí. Es mi trabajo.
- Ojalá todo el mundo lo viera y actuara igual ¿de que color tienes los ojos?
entonces me mostró dos perlas marrones y sentí pena por tener que ocultarlos por el sol bajo y tempranero de la primavera de Madrid.
Era tarde y yo iba con la hora pegada al culo sin poder perder un segundo si quería llegar a tiempo. Y quería.
Era tarde y yo iba con la hora pegada al culo sin poder perder un segundo si quería llegar a tiempo. Y quería.
Con todo lo mejor fue el dia que pase con "G" y la comilona que nos metimos entre pecho y espalda en un chino. Por cierto que la endocrina me ha quitado la leche entera ahora tiene que ser desnatada, naturalmente no pienso tomar esa especie de agua sucia que no sabe a nada.