Es la obra mas importante del modernismo madrileño. Pertenece a la escuela austriaca y el arquitecto que la construyó fue mi abuelo paterno don Benito González del Valle que era arquitecto del ayuntamiento de Madrid y restaurador del museo del Prado, así como poeta -tengo un libro suyo comprado por internet, de 1945- y fue miembro fundador de La Gran Peña, un club a la manera de los británicos del XIX. No admite socias aunque las mujeres ya pueden entrar, y disfrutar sus instalaciones salvo del salón privado. Lo podéis comprobar en el número dos de la Gran Vía. Otro dia os hablo de ella. El rey Juan Carlos es presidente de honor.
La Casa de los Lagartos tiene un lado mas ancho que el otro que acaba siendo muy estrecho, pese a eso, es toda exterior, fue un encargo del ministerio para familias con pocos recursos. Vivir hoy ahí no tiene precio.
Tiene Madrid mucha obra suya, ésta de los Lagartos es con diferencia la mas conocida, data de 1911.
Al ladito mismo de la iglesia de los Jerónimos, en la calle Ruiz de Alarcón tiene otra casa y en la calle Lagasca construyó otra para un duque o marqués no recuerdo bien. También es suya la actual sede de la Comisión Nacional del Mercado de Valores en la Castellana y las puertas de la Basílica de Jesús de Medinaceli, en Oviedo los planos del gobierno autónomo junto con otro arquitecto. También construyó por Cáceres la ciudad de mi familia materna y en Ávila, luego tiene, escaleras, balcones y en su propia casa diseñaba y fabricaba los muebles que todavía hoy día se conservan y usan, como la cama matrimonial.
Durante la guerra estuvo preso en varias checas y los rojos lo llevaron tres veces de saca pero los obreros que trabajaban con él y otros avatares, como cuando alguien le facilitó un carnet de la CNT en el último instante, le salvaron la vida cuando iban a llevarlo a Paracuellos del Jarama.
Terminada la contienda fue represaliado por el franquismo por haber estado en zona roja y Carrero Blanco le hizo la vida imposible. Aunque no le pudo quitar los puestos en el ayuntamiento ni el del conservador del Prado.
Muy joven, antes de casarse estuvo en México donde vivió un romance con una princesa azteca, "La abuela mexicana" se la llama en la familia. De vuelta a España se casó y tuvo una niña. Después conoció a la que sería su esposa para siempre, mi abuela, una hermosa jovencita de la que se enamoró perdidamente y con la que tuvo once hijos. Uno murió de niño, otra de adolescente, un tercero hepiléptico y los demás todos han superado de largo los 80.
El libro que escribió es precioso, se llama "Versos". Se imprimieron pocos ejemplares, para la familia y amigos, el mio está dedicado y hace el número 188.
Os dejo unos extractos del prólogo de Ledesma Miranda que dice así:
"Escribí versos -me dice- a los dieciocho años. A los setenta he reanudado el trabajo que dejé interrumpido. Acabada la guerra civil, me encontraba arruinado, y me dije: volvamos a hacer versos y reharemos nuestra fortuna.
Y no hay mejor negocio para enriquecerse que éste de la poesía, pues si la salud consiste en no echarla en falta, la riqueza está en no necesitarla, que es a lo que enseña, con su copia de dones, la verdadera poesía."
Don Benito González del Valle es un hidalgo de cepa asturiana, oriundo de Santa María del Mar. Nacido en Madrid, en Madrid hizo sus estudios en la escuela de arquitectura, alternando, como el hijo del Caballero del Verde Gabán, la ciencia de Salamanca con el ocio sagrado de las Musas. Hay múltiples azares en su vida: desgracias familiares, jugadas de la fortuna, horas risueñas y sombrías, pero nada ha podido torcer el "eje diamantino" que atribuía Séneca al hombre de condición egregia
Por la serenidad de su corazón, por su amor a la belleza del mundo y a la bondad de los seres, por su desdén aristocrático a la torpeza, a la vulgaridad y a la fealdad.
Y lo mejor de él es su independencia de inspiración y de acento. Tiene poco o nada de los poetas de su tiempo, lo preserva de la marchitez una especie de intemporalidad.
Y nada mas de este poeta, acaso el decano de los poetas, mas no por eso el menos joven de todos.